Una sala Gesell es una sala especialmente diseñada para facilitar la declaración de víctimas de delitos sexuales, menores de edad o personas con discapacidades, con el objetivo de minimizar su estrés emocional durante el proceso judicial, es decir, para intentar reducir el impacto de la victimización secundaria que le provoca a la víctima su participación en la investigación y posterior juicio del delito que ha sufrido.
La sala está equipada con tecnología de grabación de video y audio, y cuenta con un espejo unidireccional para que se pueda observar la declaración sin que la víctima lo note.
En la sala Gesell, la víctima puede hablar libremente sobre su experiencia sin ser confrontada por el acusado o sus abogados, lo que ayuda a reducir la intimidación y el trauma. Además, la declaración puede ser utilizada como prueba en el juicio sin que la víctima tenga que volver a declarar.
La utilización de la sala Gesell es especialmente importante en casos donde la víctima es vulnerable, como en el caso de menores de edad o personas con discapacidades, ya que su testimonio puede ser especialmente difícil de obtener. La sala Gesell es una herramienta útil para asegurar que los derechos de estas personas sean protegidos y para asegurar que se haga justicia en estos casos.
La toma de declaración
La toma de declaración de una víctima vulnerable en una sala Gesell debe realizarse con un enfoque centrado en el bienestar de la víctima, con el objetivo de minimizar el estrés emocional y el trauma que pueda experimentar durante el proceso. A continuación, se describen los pasos generales que deben seguirse para la toma de declaración en una sala Gesell:
- Preparación: La sala Gesell debe estar equipada con la tecnología de grabación de audio y video necesaria. Además, se deben tener en cuenta las necesidades especiales de la víctima, por ejemplo, proporcionándole un intérprete si es necesario, o permitiendo la presencia de un acompañante durante la declaración.
- Presentación: La víctima debe ser presentada a la sala Gesell y se le debe explicar el proceso que seguirá y cómo se utilizará la grabación de audio y video. También se le debe informar que su declaración será utilizada como prueba en el juicio.
- Entrevista: La entrevista debe ser realizada por una profesional capacitada en la toma de declaraciones de víctimas vulnerables. Durante la entrevista, se debe permitir que la víctima hable libremente sobre su experiencia, evitando hacer preguntas sugestivas o repetitivas que puedan afectar la validez de la declaración.
- Observación: La comisión judicial (juezas, letradas de la administración de justicia, fiscalas y abogadas de la defensa y acusación en su caso, más la persona investigada) pueden observar la entrevista en una habitación adyacente a la sala Gesell a través de un espejo unidireccional. Esto les permite seguir la declaración sin que la víctima se sienta intimidada o distraída.
- Seguimiento: Después de la entrevista, se debe proporcionar a la víctima apoyo emocional y, si es necesario, se debe derivarla a servicios de atención médica o psicológica.
En general, el proceso de toma de declaración de una víctima vulnerable en una sala Gesell debe ser cuidadosamente planificado y ejecutado para garantizar que la víctima se sienta segura y cómoda, y que se obtenga una declaración válida que pueda ser utilizada como prueba en el juicio.
Desarrollo de la entrevista
La entrevista en la sala Gesell debe ser realizada, como ya se ha indicado, por una profesional capacitada, como una criminóloga, psicóloga, trabajadora social o especialista en toma de declaraciones de víctimas vulnerables. El objetivo de la entrevista es permitir que la víctima hable libremente sobre su experiencia sin sentirse intimidada o coaccionada.
Para lograr esto, es importante que el entrevistador siga ciertos principios y técnicas de entrevista, como los siguientes:
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Principio de no sugestión: la entrevistadora debe evitar hacer preguntas sugestivas que puedan influir en la respuesta de la víctima. En lugar de hacer preguntas como «¿El agresor usó un cuchillo?», es preferible hacer preguntas más abiertas, como «¿Puedes describir lo que sucedió?».
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Principio de no repetición: la entrevistadora debe evitar hacer preguntas repetitivas que puedan hacer que la víctima cambie su historia o se sienta incómoda. En lugar de preguntar lo mismo varias veces, la entrevistadora debe pedir a la víctima que aclare cualquier detalle que no haya quedado claro.
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Principio de empatía: la entrevistadora debe ser sensible y empática hacia la víctima, reconociendo el dolor y el trauma que ha experimentado. Esto puede ayudar a que la víctima se sienta más cómoda y segura para hablar sobre su experiencia.
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Técnicas de entrevista: la entrevistadora puede utilizar ciertas técnicas de entrevista para facilitar la comunicación con la víctima, como hacer preguntas abiertas, permitir pausas para que la víctima pueda pensar, utilizar lenguaje sencillo y claro, y hacer preguntas de seguimiento para aclarar cualquier punto que no esté claro.
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Es importante destacar que la entrevista en la sala Gesell debe centrarse en la experiencia de la víctima y no en obtener una confesión del acusado. El objetivo principal es proporcionar a la víctima un espacio seguro y acogedor donde pueda hablar libremente sobre su experiencia, lo que puede ayudar a garantizar que se haga justicia en su caso.
¿Cómo debe ser una sala Gesell?
La sala Gesell es una habitación especialmente diseñada para la toma de declaraciones de víctimas vulnerables, como niños, niñas y adolescentes, en un ambiente controlado y seguro. A continuación, se describen las características principales de una sala Gesell:
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Ambiente controlado: La sala Gesell debe ser un espacio acogedor y controlado, que permita a la entrevistadora tomar la declaración de la víctima sin interrupciones ni distracciones. Esto puede ayudar a que la víctima se sienta más cómoda y segura para hablar sobre su experiencia.
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Tecnología de grabación: La sala Gesell debe estar equipada con tecnología de grabación de audio y video, que permita registrar la declaración de la víctima de manera clara y precisa. Esto puede ayudar a garantizar que la declaración sea válida y útil como evidencia en un juicio.
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Espejo unidireccional: La sala Gesell debe tener un espejo unidireccional, que permita a la comisión judicial observar la declaración de la víctima sin que ella se sienta intimidada o distraída. Esto puede ayudar a garantizar que se obtenga la información necesaria para tomar una decisión justa en el juicio.
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Mobiliario adecuado: La sala Gesell debe contar con mobiliario adecuado para la edad y tamaño de la víctima, como sillas, mesa y juguetes para niños y niñas en su caso. Esto puede ayudar a que la víctima se sienta más cómoda y relajada durante la declaración.
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Privacidad: La sala Gesell debe garantizar la privacidad de la víctima, para que se sienta cómoda y segura durante la declaración. Es importante que la sala esté ubicada en una zona tranquila y segura, y que el acceso sea restringido a personas no autorizadas.
En resumen, una sala Gesell es un espacio especialmente diseñado para la toma de declaraciones de víctimas vulnerables en un ambiente controlado y seguro. La sala debe contar con tecnología de grabación, espejo unidireccional, mobiliario adecuado y privacidad para garantizar que la declaración sea válida y útil como prueba en un juicio.